Definición:
La tonificación del pie consiste en estabilizar el anclaje al suelo mediante la tonificación de los músculos intrínsecos del pie. La estabilidad del anclaje al suelo depende de la capacidad del pie para mantener sus propiedades biomecánicas para asegurar su función estabilizadora. El pie está formado por una estructura llamada "pasiva" compuesta de huesos, articulaciones y ligamentos que se unen. Esta estructura pasiva se apoya en una estructura activa compuesta de músculos cortos que tienen sus inserciones y terminaciones en el pie (una veintena de músculos en total). Estos llamados músculos intrínsecos pueden distinguirse de los músculos extrínsecos del pie, que tienen su origen en la pierna y su final en el pie. Cuando hablamos de envainar los músculos intrínsecos del pie, queremos dar a estos músculos un mejor tono. Los músculos responsables de la tonificación deben ser resistentes a la fatiga y capaces de soportar el estrés en estiramiento. Estos músculos no tienen una función propulsora propiamente dicha, aunque ayudan a mejorar las propiedades elásticas del arco del pie. Bajo carga, el equilibrio depende de la estabilidad del pie en el suelo y su rápida adaptación a cualquier nueva situación. Los músculos intrínsecos potencian esta estabilidad.
¿Por qué es tan importante?
El uso de zapatos en nuestra sociedad moderna desacondiciona los músculos de los pies. El movimiento está limitado y los músculos se atrofian debido a la falta de estrés. Cuanto más temprano en la vida se usan los zapatos, más se obstaculiza el desarrollo de estos músculos. Con el paso de los años, esto conduce a un empeoramiento de los trastornos del equilibrio, que son particularmente críticos en los ancianos.
Implicaciones para la marcha
El arco del pie tiende a caerse y el pie tiende a deformarse bajo la presión del ejercicio. El HLF aumenta significativamente esta tendencia. Los músculos intrínsecos del pie juegan un papel crucial en la prevención de esta flacidez y en el mantenimiento de la estructura dinámica y reactiva del pie. El equilibrio del pie no puede mantenerse bien sin esta función y la adaptación del pie a un terreno desigual depende de ello.
HLF y los músculos intrínsecos del pie
El HLF por el efecto de tenodesis en el músculo flexor largo del hallux (LFH) predispone al colapso del arco y a la deformidad del antepié. Para potenciar el resultado de la tonificación del pie, se debe eliminar el efecto de tenodesis manipulando la articulación subtalar y realizando ejercicios específicos de estiramiento para entrenar el deslizamiento del tendón. Este es un elemento clave para el éxito del tratamiento.
Los principales músculos responsables del soporte activo del arco plantar son
1. Abductor del Hallux
2. El común flexor corto de los dedos del pie
3. Plaza de la planta
4. Interóseo dorsal
Estos músculos serán los objetivos prioritarios del protocolo de rehabilitación propuesto en este capítulo para su estrecha interacción con el FHL. El fortalecimiento de estos músculos puede realizarse de varias maneras mediante ejercicios de tonificación o electroestimulación. La combinación de estos dos métodos permite obtener resultados significativos. El programa se extiende a lo largo de 6 semanas con 1 a 2 sesiones por semana y se recomienda realizar los ejercicios en casa una o dos veces al día. Todas las actividades deportivas o de la vida diaria realizadas con los pies descalzos en todo tipo de superficies no traumáticas también son beneficiosas para el pie y optimizan el control del equilibrio. El último paso para fortalecer los músculos intrínsecos del pie es a través de un aprendizaje razonable y la práctica de correr descalzo. Las sesiones de carrera con los llamados zapatos minimalistas (sin inclinación en la suela y con muy poca amortiguación) con un ataque de la zancada por el antepié también son adecuadas. Para este último paso, le recomendamos que recurra a profesionales para una enseñanza y supervisión adecuadas, ya que una práctica mal adaptada puede provocar lesiones por sobrecarga.
Los ejercicios de fisioterapia para el pie se hacen descalzos y se demuestran aquí con el ejemplo de un paciente sentado en una silla. También es posible realizar estos ejercicios de pie, en uno o dos pies, en diferentes tipos de superficies más o menos estables dependiendo de su nivel.
Es aconsejable trabajar con un solo pie a la vez al principio de los diferentes ejercicios. No se requiere calentamiento para preparar la ejecución de estos movimientos.
1) el llamado ejercicio de "pie acortado" estimulará el músculo abductor del hallux, el flexor corto común de los dedos del pie, el músculo cuadrado plantar. La dificultad de este ejercicio es lograr crear una contracción en el arco plantar sin hacer un movimiento de garra con los dedos de los pies. El objetivo de este ejercicio es fortalecer el arco del pie y restaurar su tono.
2) El ejercicio de los dedos del pie en abanico apunta a los músculos interóseos dorsales del pie. Estos músculos son importantes para mantener los metatarsos en su posición al cargar el pie.
3) El ejercicio de dibujo de caracoles requiere algún equipo. Trae una hoja de papel A4 y un lápiz o lapicero además de la silla. Este ejercicio apunta al músculo aductor del hallux. Aunque este músculo no es uno de los principales que dan tono al arco del pie, está involucrado en la sinergia con el corto flexor de los dedos del pie en la fase propulsora de la zancada. Este ejercicio es excelente para entrenar la destreza general de los pies.
La electroestimulación muscular tiene como objetivo estimular y fortalecer ciertos músculos del pie mediante la estimulación eléctrica. Un profesional coloca electrodos en el lado plantar y medial del pie e induce la contracción del músculo por impulsos eléctricos. Este método puede combinarse con ejercicios en 1 o 2 pies, en superficies más o menos inestables dependiendo del nivel del paciente.
Fourchet, B. Gojanovic Foot core strengthening: relevance in injury prevention and rehabilitation for runners, N°64(1)-2016 - F. Swiss Sports and Exercise Medicine.
Un article qui traite de manière claire et succincte le concept de foot core et l’intérêt qu’il représente au niveau athlétique, pour les sportifs de tous niveaux.
Patrick O McKeon, Jay Hertel, Dennis Bramble, Irene Davis : The foot core system: a new paradigm for understanding intrinsic foot muscle function BJSM, 2013
Achini Soysa, Claire Hiller, Kathryn Refshauge and Joshua Burns : Importance and challenges of measuring intrinsic foot muscle strength. Journal of Foot and Ankle Research2012
Gaillet JC1, Biraud JC, Bessou M, Bessou P. Modifications of baropodograms after transcutaneous electric stimulation of the abductor hallucis muscle in humans standing erect. Clin Biomech (Bristol, Avon). 2004 Dec;19(10):1066-9.
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